Tres formas distintas de ocupar las calles

Cuando las bicicletas son las preferidas: Holanda
Las motos son la opción preferente en Italia
Los coches son los reyes de la calle en México

Sin lugar a dudas, me decanto por la primera opción. En países con buen clima y superficies planas no debería haber pretexo para usar y fomentar la bici. Hay países como Holanda, o incluso, como Suecia, en donde, con todo y climas hostiles y con superficies inclinadas (pienso en Uppsala), la bici es una excelente alternativa.  Reflexionemos más sobre los efectos benignos a nivel individual y social:mejor salud,  menos tráfico de coches y menos contaminación ambiental: aire más puro y menos ruido de motores, de claxons.

Si vives o estás de paseo en la Ciudad de México, baja el manual del ciclista urbano aquí

Suecia en imágenes

Hola a todos!Aquí van mi participación del foro:

¿Cómo se ubica, entonces, el surgimiento de la Sociología con esta tradición de pensamiento modernista?

De acuerdo a  las distinciones de modernismo y modernización del profesor Forte, vemos que la modernización se entiende como las  transformaciones en el ámbito económico, del Estado y de la sociedad, así como los cambios científicos y tecnológicos,  mientras que el modernismo se distinguirá más bien como el pensamiento o reflexión crítica sobre los cambios y transformaciones en la condición humana que conlleva la modernización.  Así pues para Marx, la alienación del hombre que produce  el estadio capitalista puede ser superada cuando éste tome conciencia de si y de lo que hace y produce, generando así una transformación en las relaciones de producción.

Podríamos pensar, entonces,  que la sociología surge como una forma de pensar e interpretar la modernidad   debido a  los cambios y transformaciones que se van dando desde el siglo XVI y subsiguientes como procesos de la modernización. El aspecto modernizador, no modernista, de la sociología puede verse en su énfasis en la racionalización -eje central de la modernidad- y el uso del rigor científico y saber empírico, así como su propio proyecto de transformación según el avance de los estadios teológico,  metafísico y científico.

Esto es, la sociología se verá a si misma, como una ciencia que trata de interpretar las condiciones de racionalidad, es decir, comprender el sentido del mundo mediante la relación de medios -fines para poder así, interpretar, ordenar y convivir de acuerdo a la razón.   La sociología se entiende también como una disciplina del orden y  que si bien avanza hacia un estadio final científico, mantiene la ilusión de que la ciencia será la que proveerá de un nuevo orden y certeza en base a la racionalidad de los medios y fines en una sociedad que ha perdido su sentido.

¿En qué sentido afirma Marshall Berman que “todo lo sólido se desvanece en el aire”?

Berman habla de “todos los sólidos se desvanecen en el aire” a partir de la lectura de Marx y la crítica de éste a las transformaciones que se están viviendo en pleno siglo XIX. Las instituciones sociales, económicas, políticas, se están viendo socavadas constantemente debido a las transformaciones tecnológicas. Lo moderno implica novedad y cambios constantes que pueden traer aventura, alegría y placer, pero también ocasionan desasosiego, pues los apoyos se van desvaneciendo frente a los cambios inmediatos que amenazan con perjudicar y destruir a los propios modernos. La rigidez de las instituciones políticas y sociales se flexibilizan, e incluso, el propio individuo cambia de atributos constantemente.

Asimismo, Berman  enfatiza que Marx sabía perfectamente la contradicción de tal frase: Si bien las máquinas producen mejoras en el trabajo, también producen una serie de daños ambientales. El capitalismo genera hombres ricos y libres, por otro lado, esclaviza a otros.  Las propias sentencias de Marx son tratadas por el mismo con ironía y dudas, pues ellas mismas se desvanecen. Todo aparenta ser como un mundo heracliteano de que todo cambia y nada permanece. Se ven fantasmas que no pueden ser tocados. Los vínculos sociales también se fracturan  y como dijera Nietzsche, otro modernista solemne, “hay un gusto para probarlo todo”.

Es como repetidas veces lo ha parafraseado el sociólogo Zygmunt Bauman: modernidad líquida, todo es líquido.

Ahora bien, supongo también que Berman hace uso de esa frase para hacer una llamada de atención frente a las tendencias extremistas al pensar la modernidad: sean los extremos la visión tecno pastoril de nostalgia por el pasado, por un lado,  o bien la visión posmoderna relativista, por el otro. La idea es rescatar el sentido crítico de los modernistas, asumiendo las contradicciones de la modernidad  y confiando en la construcción de  un nuevo hombre.

¿Cómo podríamos relacionar esta idea con las ideas propuestas por Georg Simmel en “El individuo y la libertad”?

Simmel describe que el individualismo surge como una idea de libertad. Esto es, liberar al individuo y su esencia violentada por la opresión de las instituciones  sociales. Por medio de esta liberación el hombre revelará la esencia verdadera que es común a toda individualidad:”más allá de sus ataduras sociales y ropajes accidentales, todos los hombres son idénticos” (Simmel). Esta individualidad fue entendida como el Yo, la Razón o la Humanidad.  La idea era  hacer al hombre perfecto, revelar su esencia. Lo que la modernidad mostró es que esa fractura de las instituciones provocó una serie de crisis en los individuos y en la sociedad- y en relación a la pregunta anterior y Berman- todos los sólidos (instituciones, papeles sociales) se iban disolviendo en el aire.  Podemos ver en esto relación con el punto de vista de Marx y de Berman. También esta idea de libertad en la esencia común de los hombres generó la contradicción de la libertad y la igualdad. Los hombres se iban diferenciando y de hecho, hubo un deseo de que el individuo se diferenciara como un punto de solidez y carácter inequívoco. Las contradicciones de la modernidad aparecen nuevamente: “No sólo la igualdad entre los hombres es una exigencia moral, sino también su diferencia” (Schleiermacher).  Así pues estas oposiciones se vieron en contante dinámica (¿dialéctica?) un día la singularidad era vivida como absoluta y al otro, la unicidad y la igualdad.  Simmel traslada esta oposición al ámbito económico: la libertad en la igualdad fomenta la competencia y la singularidad la división de trabajo.

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Un saludo!

Estrella